Con la venia de la presidencia.

El Partido Verde apoyará el proyecto de decreto que se pone a consideración de esta Asamblea por las siguientes razones.

Tenemos la convicción que las Consultas Populares realizadas en términos de lo previsto en la Ley y organizadas por el INE contribuyen a fortalecer nuestra democracia y son una herramienta de gobernabilidad que hasta hoy habían sido letra muerta en México.

La participación del INE en las Consultas Públicas así como en la revocación de mandato garantizará la certeza, legalidad e imparcialidad en actividades tan importantes como la capacitación electoral, la ubicación de las casillas, la designación de los funcionarios de sus mesas directivas, así como el escrutinio y cómputo de los votos.

Votaremos a favor porque ésta propuesta hace más fácil el acceso a la consulta pública y esto sin duda abona al fortalecimiento de los derechos políticos de los ciudadanos.

Votaremos a favor por qué se disminuye el porcentaje necesario para que una consulta sea vinculante lo que da eficacia al voto emitido por el Ciudadano, fortaleciendo por ende sus derechos.

Votaremos a favor por qué la propuesta garantiza que todas las Consultas Públicas del futuro sean organizadas por el INE y avaladas por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Votaremos a favor por qué existen restricciones a los temas que pueden ser objeto de consulta y por qué se incluyó nuevamente la materia electoral. Es decir, ningún tema electoral llámese elección o reelección puede ser objeto de Consulta Popular.

Creemos de igual forma que la revocación de mandato puede ser un instrumento que nos conduzca a tener mejores gobernantes y da un voto de confianza a los ciudadanos para calificar con consecuencias, el trabajo bien hecho o, en su caso, castigar el trabajo deficiente o corrupto de sus gobernantes.

De igual forma que la Consulta Popular, la revocación de mandato estará organizada por el INE y contará con la participación de la Sala Superior del Tribunal electoral.

Es importante destacar que la revocación de mandato no implica la difusión de propaganda a la par de las campañas electorales.

En otras palabras realizar una campaña para la revocación de mandato contradice lo dispuesto por el artículo 134 de nuestra Constitución y contradice varios precedentes que se han emitido en la materia desde el 2006 y 2009 donde incluso se llegó a sancionar conductas de un Presidente que violaron el principio de imparcialidad que debe salvaguardar todo servidor público.

Es cierto que las autoridades electorales federales, INE y Sala Superior han sido omisos en su actuación y han generado poca certeza en la aplicación de la ley por criterios garantistas que solo entienden ellos. Sin embargo, en un régimen democrático no nos queda de otra, más que confiar en las instituciones que hoy tenemos y exigirles que el texto de la Constitución y la ley se respeten, cumpliendo los principios que nos hemos dado en materia electoral, tales como la certeza y legalidad.

Que a pesar de esto, ni la Constitución ni la ley se respetan, el problema será otro. Pero definitivamente no será la revocación de mandato y la consulta popular.

Finalmente votaremos a favor porque consideramos que los ciudadanos en México son mayores de edad desde hace años y han entendido para lo que sirve un voto. Por ello, no tengamos duda que el ciudadano percibe es capaz de percibir sí un gobernante es bueno o no, si se está avanzando o no, y este conocimiento no depende de los programas sociales que se otorguen, sino de la realidad en que viven.

Pero en eso estriba la revocación de mandato, en crear los incentivos para tener mejores gobernantes, no se trata solamente de ganar una elección.

Vivimos épocas de cambio en todo el mundo. Los ciudadanos de todo el mundo están en profundo desacuerdo con la forma en que son gobernados y a su vez, son objeto de una lluvia de información que los mantiene plenamente informados del quehacer social y político. Los ciudadanos hoy, y como nunca antes, tienen voz y opinión permanente en la cosa pública. La libertad de expresión más pura la tenemos en las redes sociales.

Esta nueva realidad exige que existan mecanismos y procedimientos certeros que garanticen una verdadera participación ciudadana que encaucen las opiniones diversas y que generen en suma, gobernabilidad.

Así también, para que las instituciones tengan credibilidad deben ser objeto de escrutinio constante y si además, empoderamos a los ciudadanos para pronunciarse sobre el desempeño de sus gobernantes, tendremos sin duda mejores servidores públicos.

La alternancia a nivel presidencial en México es relativamente nueva. 18 años no son nada a lo largo de nuestra basta historia, sin embargo, estos 18 años han sido aleccionadores si hacemos un análisis a conciencia.

Con la llegada de Morena a la Presidencia prácticamente todos los Partidos aquí representados habrán gobernado a nivel poder ejecutivo. Esto se traduce en que todos los partidos tendrán la experiencia de gobierno, sabrán el peso de sus decisiones y tendrán además conocimiento pleno de los problemas que aquejan al México real.

Si a esta experiencia le sumamos instrumentos de participación ciudadana con certeza, como los que hoy se proponen, vamos a tener mejores gobernantes, más tolerantes y objetivos y sobre todo, contaremos con instrumentos que generarán gobernabilidad en beneficio de todos.

Por ello votaremos a favor del presente dictamen.

PARTIDO VERDE