- La iniciativa del diputado Eruviel Ávila, busca llenar un vacío legal para evitar que este tipo de conductas escalen a formas más graves de violencia
Con el fin de cubrir una laguna en la ley y evitar que el acecho ponga en riesgo la vida de quienes lo padecen, principalmente mujeres, el diputado Eruviel Ávila Villegas, del Grupo Parlamentario del Partido Verde, propuso reformar el Código Penal Federal, para tipificar como delito esta conducta y establecer sanciones de hasta dos años de prisión a los agresores.
De acuerdo con el legislador ecologista, delitos como el hostigamiento sexual, el abuso sexual, la violencia digital y la violación a la intimidad sexual, así como las amenazas, son delitos que ya están tipificado en el marco legal mexicano con sanciones específicas, pero el acecho, tal como se plantea cubre una laguna legal que aún no se ha abordado de manera clara.
Es por ello que la iniciativa "busca llenar el vacío legal actual al tipificar el acecho como un delito autónomo en el Código Penal Federal y la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, reconociendo su impacto psicológico y protegiendo a las víctimas antes de que la situación escale a formas más graves de violencia", explicó.
La propuesta plantea que "comete el delito de acecho quien en dos o más ocasiones, de manera deliberada, sin el consentimiento de la víctima, ya sea por sí misma o por medio de un tercero, siga, observe, vigile, acose o mantenga comunicación insistente con otra persona, ya sea de forma presencial o mediante cualquier medio tecnológico, incluyendo redes sociales o dispositivos de rastreo, con la intención de generar en la víctima un estado de miedo, angustia, inseguridad o alteración de su vida cotidiana"
Añade que quien cometa este delito, se le impondrá una pena de tres meses a dos años de prisión y de 500 a mil días de multa. Las penas se agravarán y se incrementarán en dos terceras partes en los mínimos y máximos en casos específicos como, por ejemplo, cuando se ingrese al domicilio de la víctima, de personas cercanas o familiares, si la víctima se encuentra en estado de embarazo o cuando el acecho se realice en presencia de hijos o menores.
Si el agresor es reincidente, si se causa daño físico o psicológico significativo a la víctima, si se utilizan armas, si se quebranta una orden de protección, si la víctima es menor de edad, persona con discapacidad o adulto mayor, etc.
Eruviel Ávila resaltó que la tipificación del acecho es un paso imprescindible para garantizar la justicia y la protección de los derechos fundamentales de las víctimas. "No podemos seguir permitiendo que miles de personas vivan bajo la constante sombra del miedo y la inseguridad, sin una respuesta efectiva por parte de las instituciones del Estado", señaló.
Añadió que México debe cerrar esta laguna legal de inmediato y asegurar la protección que nuestras leyes y los tratados internacionales ya reconocen. "Esta reforma no solo tendrá el potencial de transformar vidas, sino que también demostrará el compromiso del país con la seguridad, la dignidad y el bienestar emocional de toda su ciudadanía", indicó.
"Hay que recordar que detrás de un feminicidio, a veces hay todo un acecho en contra de una mujer y eso no lo podemos permitir", comentó el diputado a través de sus redes sociales.
Recientemente, Tapachula ha sido clasificada entre las cinco ciudades más peligrosas de México, con un alarmante 84.7 por ciento de sus habitantes sintiéndose inseguros. Por su parte, Tuxtla Gutiérrez también enfrenta un aumento preocupante en la percepción de inseguridad y la incidencia de crímenes violentos.
Ante esta lamentable situación, el Senador Luis Armando Melgar, expresó gran preocupación por lo que representa que dos de las ciudades importantes en el Estado, sean de las regiones más afectadas por la violencia. "Dos ciudades emblemáticas de nuestro querido Chiapas, enfrentan hoy uno de los retos más críticos de su historia reciente", puntualizó.
La seguridad es la base de cualquier sociedad próspera, y en Chiapas, un estado que tiene con qué salir adelante, no se puede permitir que el miedo frene el desarrollo y el bienestar de la gente. "En mi obra 'Chiapas tiene con qué', siempre he subrayado la importancia de una estrategia integral que no solo aborde la economía y la producción, sino que también coloque la paz y la seguridad como prioridades esenciales para lograr un verdadero progreso", agregó.
Tapachula, una ciudad que ha sido históricamente un motor económico y un punto clave en la frontera sur, está viviendo una crisis sin precedentes debido a la creciente violencia. No podemos permitir que el temor siga latente. Es urgente que se implementen acciones concretas por parte de las autoridades para recuperar la tranquilidad de nuestras calles.
"Es hora de que actuemos con firmeza y determinación. La seguridad es un compromiso de todos: gobierno, empresarios y sociedad civil. Porque sin seguridad, no hay futuro. Chiapas tiene el potencial, pero necesitamos construir sobre bases sólidas la recuperación de la paz y la seguridad de nuestras ciudades", finalizó.
Chiapas ha dado un paso firme hacia la recuperación de su riqueza natural con la puesta en marcha del plan de siembra de 530,000 árboles de la iniciativa "Un Árbol por un Voto", liderada por el Senador Luis Armando Melgar. Esta no fue solo una promesa de campaña, sino un compromiso real que ya está en marcha.
La iniciativa busca más que una simple reforestación: pretende restaurar el equilibrio ecológico de Chiapas, recuperando las zonas verdes que han sido afectadas por la deforestación y la expansión desmedida. Este proyecto es una inversión en el futuro de nuestro Estado, una oportunidad para asegurar que las próximas generaciones crezcan rodeadas de la misma belleza natural que ha caracterizado a Chiapas desde siempre.
"Cada árbol plantado representa un voto de confianza de los chiapanecos hacia un futuro más verde y sostenible. Pues desde la contienda al Senado, promovimos esta campaña y ahora coordinamos acciones concretas para cumplir con esta meta, gestando la siembra de miles de árboles que se llevarán a cabo en distintas regiones del Estado", señaló Melgar.
Agregó, que este esfuerzo no solo busca frenar los daños medioambientales, sino también generar conciencia colectiva sobre la importancia de cuidar nuestros recursos. Melgar ha dejado claro que la participación ciudadana es clave en esta tarea, e invitó a todos los chiapanecos a sumarse a esta causa que busca restaurar a Chiapas, que es nuestro hogar.
"Chiapas tiene con qué, con sus recursos, con su gente y ahora con este esfuerzo coordinado, estamos devolviendo la vida a nuestros ecosistemas. "Un Árbol por un Voto; significa el compromiso de plantar 530,000 árboles, que ya empezamos a gestionar, y con ello, estamos 'sembrando futuro', para un Chiapas más verde, más fuerte y más sostenible", finalizó Melgar.