URGE PARTIDO VERDE A CREAR ACCIONES PARA CONSERVAR Y PROTEGER LOS ARRECIFES DE CORAL

● De la salud de los arrecifes depende el turismo, la pesquería, los océanos y la calidad de vida de los estados costeros.

Con la finalidad de proteger y conservar los arrecifes de coral mexicanos y el Sistema Arrecifal Mesoamericano, la senadora Maki Esther Ortiz Domínguez presentó un punto de acuerdo para exhortar a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y al Gobierno de Quintana Roo, para realizar diversas acciones de conservación en favor de estas estructuras submarinas, particularmente la ubicada en esta zona del país.

Agregó que además de su gran biodiversidad, los arrecifes de coral también tienen un enorme potencial económico, ya que proporcionan bienes y servicios valorados entre 29.8 mil millones de dólares y 375 mil millones de dólares anuales en pesca, turismo y protección de la costa. Específicamente en el Caribe Mexicano se estima que los arrecifes de este sistema generan aproximadamente 7.5 mil millones de dólares al año en estos rubros.

Subrayó que los arrecifes albergan cerca del 25 por ciento de todas las especies marinas, aún cubriendo aproximadamente el 0.1 por ciento de la superficie oceánica, además de que sirven como espacios de reproducción de especies, cambian la dirección y velocidad de las corrientes marinas, tienen una estrecha relación con otros ecosistemas y funcionan como barrera natural para las costas frente a huracanes.

Sin embargo, lamentó que a pesar de la gran riqueza de biodiversidad y económica que brindan los arrecifes, de acuerdo con el reporte "Arrecifes en riesgo" del Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés), el 60 por ciento de los arrecifes del mundo están amenazados por actividades como la sobrepesca, la pesca destructiva, los desarrollos costeros y la contaminación.

Detalló que algunas de las amenazas que sufren son: calentamiento y olas de calor marinas, acidificación y cambio climático, contaminación y eutrofización, crecimiento costero no planificado, daños físicos por encallamientos de embarcaciones o pesca destructiva, enfermedades del coral y especies invasoras.

Dijo que los arrecifes de coral en nuestro país no cuentan con una protección clara ni con una política de conservación específica, a pesar de que en el año 1997 los presidentes de México, Guatemala, Honduras y el primer ministro de Belice firmaran la “Declaración de Tulum” que daría reconocimiento al Sistema Arrecifal Mesoamericano, acuerdo que fue ratificado en 2006 pero al que no se le ha dado seguimiento ni se ha trabajado en cumplir sus compromisos.

Explicó que el Sistema Arrecifal Mesoamericano es considerado la barrera de coral transfronteriza más grande del planeta, que representa una importante reserva de biodiversidad, “albergando una gran variedad de especies que sustentan los medios de vida de más de dos millones de personas a través de actividades como el turismo y la pesca”, además de que desempeña un papel fundamental en la protección costera frente al oleaje y a los huracanes.

Por ello, insistió en que urge promover políticas de conservación y actualizar la información respecto a los avances en cuidado, protección y restauración de los arrecifes de coral, y recalcó que se deben retomar los esfuerzos de conservación regional para proteger al Sistema Arrecifal Mesoamericano, ya que de la salud de los arrecifes depende el turismo, la pesquería, los océanos y la calidad de vida de los estados costeros.