· Se desperdician más de 20 millones de toneladas de alimentos en nuestro país al año, mientras 7 millones de mexicanos padecen hambre.

Problemática

El problema de la carencia alimentaria no radica en la escasez de alimentos sino en el acceso limitado a los mismos y en las externalidades derivadas de la producción de víveres sin aprovecharse, que generan un impacto negativo en el medio ambiente, así como un desequilibrio en los recursos naturales.

De acuerdo con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología ha indicado que si se reúnen los más de 20 millones de toneladas de alimento desperdiciado sería posible entregar semanalmente a las familias más pobres una canasta alimentaria integrada de 4 kilogramos de carne, 3.8 kilos de pollo, 16 litros de leche, 15 kilos de tortillas y 2 kilogramos de mango, con lo cual saldría de la pobreza alimentaria.

La pérdida de alimentos genera un impacto negativo en el ambiente, con una generación de emisiones de dióxido de carbono equivalentes a las emisiones anuales de casi 15 millones de automóviles, comparable con los automóviles que circulan en la Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León y Jalisco.

Asimismo el recurso hídrico utilizado para la producción de víveres se desperdicia aproximadamente 40 billones de litros, volumen suficiente para proveer a todos los mexicanos de agua durante 2.4 años.

 

El Partido Verde propone:

No podemos permitir que continúe la pérdida de alimentos, y persistan los impactos negativos a nivel social, económico y ambiental, aseguró el senador Raúl Bolaños Cacho al presentar una iniciativa que busca incrementar y fortalecer los Bancos de Alimentos en México, pues se desperdician anualmente más de 20 millones de toneladas de frutas, verduras, carnes, cereales y leguminosas, así como sus derivados, en nuestro país.

Dicha propuesta busca fomentar la cultura del aprovechamiento de alimentos y su donación, su correcto manejo y canalización a la población con carencia alimentaria, con la finalidad de abrir la puerta a la creación de programas que permitan reducir el desperdicio de alimentos, pues un adecuado manejo de estos solucionaría la falta de víveres en algunas comunidades.

El senador por Oaxaca destacó finalmente que la labor que realiza la Asociación de Bancos de Alimentos en México es por demás favorable, sin embargo es necesario fortalecerlos a través de un mecanismo jurídico que fije las bases para precisar los objetivos y líneas de acción a implementar para garantizar el derecho constitucional a la alimentación, prevenir el desperdicio de alimentos, fomentar su rescate y recuperación, así como la reutilización de los alimentos, haciendo hincapié en el ámbito federal y la coordinación con las autoridades locales.

 

Beneficios: Prevenir el desperdicio de alimentos, fomentar su rescate y recuperación para alimentar a más de 7 millones de mexicanos que padecen hambre.