Acudo ante esta tribuna a casi un mes de que se celebrará el Día Mundial del Donante de Sangre, el cual este año tuvo el lema: "Date a los demás. Dona Sangre, comparte vida".

En nuestro país, se donan diariamente 5 mil unidades de sangre, sin embargo; la mayoría se obtiene por reposición y solo el 2.7 por ciento es de forma altruista.

El anterior porcentaje resulta alarmante y muy por debajo de los estándares internacionales, lo que nos coloca muy lejos de lograr uno de los objetivos de la Organización Mundial de la Salud para el 2020, que es "que todos los países obtengan su suministro total de sangre proveniente de donantes voluntarios no remunerados."

Los beneficios de la donación voluntaria son muchos y la necesidad de aumentar el número de donantes voluntarios de sangre es insoslayable, ya que la sangre solamente puede ser almacenada por un período de tiempo limitado y después debe ser descartada.

Por lo anterior, es que en este acto presento una iniciativa que propone adicionar una fracción 30 al artículo 132 de la Ley Federal del Trabajo para:

1. Permitir a los trabajadores faltar por 1 día a su trabajo para acudir de manera voluntaria a donar sangre o cualquiera de sus componentes; siempre y cuando se de aviso con la oportunidad debida y que su ausencia no perjudique la buena marcha del establecimiento donde trabaja.

2. Para justificar su inasistencia, el trabajador deberá presentar el comprobante expedido por una institución del Sector Salud o el banco de sangre, y

3. El trabajador sólo podrá hacer uso de este derecho 2 veces al año como máximo.

Si analizamos el permiso que se propone otorgar, éste no representaría una pérdida significativa para el patrón, especialmente si se compara con los enormes beneficios que puede dar para nuestro Sistema de Salud, como: salvar miles de vidas; monitorear la salud sanguínea del donante y detectar a tiempo muchas enfermedades ocultas como la hepatitis B y C, VIH, sífilis, etcétera; contribuir también con el avance de la medicina, y sobre todo salvaguardar el derecho a la salud de las y los mexicanos estipulado en el artículo 4° de nuestra Carta Magna.

En suma, la donación de sangre es un acto altruista que nos beneficia a todos.

Para mi partido, fomentar la vida y salvaguardar la salud se ha vuelto un estandarte de constante lucha, por eso les pido a todos que sigamos uniendo esfuerzos para que iniciativas como esta que hoy presento a nombre de mi fracción parlamentaria se haga una realidad, ya que la sangre es uno de los regalos más valiosos que podemos ofrecer a otras personas.

Por su atención muchas gracias.

PARTIDO VERDE