Frente a la urgencia de impulsar políticas públicas que garanticen seguridad social a todas las niñas y los niños de México, no hay cabida para diferencias y disputas políticas, expresó la diputada Carla Alicia Padilla Ramos al señalar que más de un millón de menores no gozan de servicios de salud, educación y alimentación de calidad.

La legisladora enfatizó que difícilmente los infantes lograrán alcanzar un desarrollo integral si no se trabaja en rescatar el respeto e impartición de sus derechos fundamentales, sobre todo, en lugares que se ocupan de su cuidado, atención y formación; como es el caso de las estancias infantiles.

Padilla Ramos definió como irresponsable que terribles acontecimientos como el registrado en la Guardería ABC en Hermosillo, Sonora, donde murieron 49 niños, sean lo que ponga en evidencia las ineficiencias en la operación de los centros infantiles; y no un supervisión severa y preventiva.

Y es que dijo, de las 16 mil guarderías del gobierno que funcionan en México, únicamente el 3.3 por ciento cuenten con atención médica directa; es decir, el resto envían a los menores a hospitales de las instancias gubernamentales a las que pertenecen para ser atendidos.

“La tarea inmediata es evidente, otorgar una mejor calidad de vida y atención por parte del Estado y de las instituciones a los menores cuyos primeros años de vida son decisivos para su desarrollo cognitivo y psicosocial”, puntualizó.

En este sentido, reconoció el acierto de la reciente aprobación de la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes; “es una nueva oportunidad para hacer las cosas bien en lo que concierne a la satisfacción de las necesidades básicas de los infantes”.

Finalmente, la secretaría de la Comisión de Salud destacó que las niñas y niños, sin importar situación socio-económica a la que pertenezcan, deben gozar de las mejores condiciones para un crecimiento integral; ya que “las nuevas generaciones son fundamentales para la prosperidad del país”.

 

PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO