El modelo actual de la política habitacional en nuestro país, aun es excluyente, pues está estructurado en torno a lo que podemos llamar el enfoque de la financiación en donde se rige la lógica financiera que domina y condiciona los componentes del proceso de producción de vivienda.

Por ello, la propuesta es que debe impulsarse la integración de la representación del sector laboral en los órganos colegiados del diseño y dirección de los organismos responsables del desarrollo de las políticas de vivienda en nuestro país.

Con la vigente Ley de Vivienda Reglamentaria del artículo cuarto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se redefinieron los lineamientos de la política nacional en esta materia, así como sus contenidos y el Programa Nacional de Vivienda, creándose una estructura de manera ordenada y funcional, denominada Sistema Nacional de Vivienda.

El texto legal vigente determinó que el Ejecutivo Federal contará con un Consejo Nacional de Vivienda, que tendrá como objeto proponer medidas de planeación, formulación, instrumentación, ejecución y seguimiento de la política nacional en este tema, y una comisión intersecretarial de vivienda, encargada de garantizar la ejecución, coordinada de los programas y el fomento de las acciones en esta materia.

Además, el Estado Mexicano ha implementado políticas habitacionales creando organismos y mecanismos para dotar una vivienda a los trabajadores, estableciendo una estrategia para contar con fondos que le permitan cumplir con lo previsto también en la ley en comento.

Efectivamente tenemos que seguir trabajando porque hoy la Política Nacional de Vivienda también incluye acceso a sectores muy importantes de la sociedad que por primera ocasión van a poder gozar de este privilegio, y me refiero, en este caso a el acceso a créditos dirigidos, principalmente a mujeres, jefas de familia que por primera ocasión van a tener el acceso a una vivienda que será el patrimonio que puedan también heredar a sus hijos.

Es un esquema de financiamiento que por supuesto no tiene punto de comparación en nuestro país, y que de manera mensual podrán ellas ir pagando su vivienda y absorbiendo por el Estado Mexicano una parte muy importante de este subsidio.

También no podemos dejar de reconocer que hoy se tiene también ya un programa específico de acceso de reconocer que hoy se tiene también ya un  programa específico de acceso a la vivienda para jóvenes.

Afortunadamente es hoy una realidad donde en muchas ocasiones  los jóvenes que  viviendo solos o viviendo en familia, en muchas ocasiones tienen que dejar los estudios por no poder cumplir con esta responsabilidad.

La respuesta que ha dado la SEDATU y el Gobierno de la República a esta solicitud de los jóvenes hoy también es una realidad  donde se da acceso a la vivienda, a jóvenes, a mujeres y hombres que así lo soliciten y que por supuesto puedan cubrir y contar con un lote, con todos los servicios o bien la adquisición de una  vivienda nueva.

No puedo dejar de mencionar las múltiples opciones que tiene  hoy quien vive en área rural para poder ampliar, modificar, agrandar o bien de obtener una vivienda nueva.

Son múltiples los espacios y los  programas  que se están llevando a cabo y que tendrán que robustecerse con una Ley que favorezca su cumplimiento y sobre todo que pueda ser exigible por todos y cada uno de los mexicanos.

En esta estrategia, como lo había hoy mencionado, concurren las  tres figuras  a saber el trabajador, el patrón y el estado en muchas de ellas quienes participan económicamente de manera proporcional  en la aportación, integración y conservación de fondos.

Bajo ese esquema, y sobre todo me refiero a donde son tripartitas la propuesta específica es que es necesario que los trabajadores  siendo los beneficiarios directos participen en este diseño de instrumento de las políticas públicas de vivienda, sobre todo para velar por sus intereses y también para hacer exigibles sus derechos.

La vivienda es una garantía constitucional, es preciso que los representantes  tanto del sector obrero concurran en la vigilancia y observancia del cumplimento de este mandato  establecido en la Carta Magna.

Es de suma importancia la intervención, pues entonces de los representantes de los trabajadores en la toma de decisiones en materia de vivienda  de nuestro país, ya que son ellos quienes generan los recursos para la ejecución de estos programas.

La normatividad en materia  en materia de vivienda debe aplicarse bajo principios  de equidad y de inclusión social.

Por lo anteriormente expuesto es entendible y por supuesto  la solicitud y la propuesta  legislativa de incorporar a los representantes de los sectores laborales y organizaciones sindicales al Consejo Nacional de Vivienda, en tanto con ello se atiende  a los principios de pluralidad y equidad, así como la participación articulada de todos los actores productivos en el diseño y desarrollo  de la política nacional  de vivienda.

Con ello termino, señor Presidente, muchísimas gracias.

PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO