Con la venia de la presidencia; maestra Delfina Gómez Álvarez, Secretaria de Educación, sea usted bienvenida.
"Sólo durante el fugaz instante de nuestra participación con lo absoluto podemos afirmar que exististimos" expresó alguna vez José Vasconcelos, primer titular de la Secretaría de Educación Pública, quien veía en la enseñanza una forma de salvar a los niños, de educar a los jóvenes, de ilustrar a todos y de difundir una cultura generosa y enaltecedora.
La educación es el espacio donde concurren las necesidades individuales de autoconocimiento y el aprendizaje de saberes, valores, creencias y hábitos; es el pilar del desarrollo de las naciones, es ésta la que da la conciencia social e identidad nacional a un pueblo.
En este sentido, el acceso a la educación tiene que garantizarse para todas y todos por igual y debemos asegurar que sea inclusiva, democrática, participativa, de calidad y, sobre todo, humana.
Hace cien años, poco después del triunfo de nuestra Revolución y debido al gran rezago que en materia de educación prevalecía entre la población mexicana de entonces, se consideró necesario emprender una cruzada educativa nacional que hiciera llegar a todo el país una instrucción gratuita, laica y obligatoria que enseñara al mayor número posible de mexicanas y mexicanos a leer y escribir y a dominar las cuatro operaciones aritméticas básicas.
En este escenario, el lunes 3 de octubre de 1921, se emitió el decreto para la creación de la Secretaría de Educación Pública, que sería la encargada del sistema educativo nacional, con la encomienda institucional de sumar las políticas locales en esta materia que contribuyeran al desarrollo de nuestro país y al bienestar de sus habitantes mediante la enseñanza.
Lo anterior representó la federalización de la educación en nuestro país en un contexto donde los municipios, a pesar de sus buenas intenciones, habían sido incapaces de afrontar la problemática educativa y en todo el territorio nacional se resentía gravemente la falta de una adecuada organización.
En sus inicios la actividad de la Secretaría de Educación Pública se caracterizó por su amplitud e intensidad, organizando cursos, abriendo escuelas, editando libros y fundando bibliotecas, medidas que, en su conjunto, fortalecieron un proyecto educativo nacionalista que reivindicaba una de las principales demandas de la lucha revolucionaria a la vez que recuperaba las mejores tradiciones de nuestra cultura universal.
A 100 años de la creación de la Secretaría de Educación Pública son muchos los logros que se han registrado en la materia, fundamentalmente en cuanto respecta a la alfabetización de la población cuyo porcentaje rebasó el 95 por ciento en 2020.
En el Partido Verde reconocemos desde esta tribuna a todos quienes hayan contribuido en algo a concretar lo anterior, especialmente a mis colegas, las maestras y los maestros, de manera muy destacada a quienes hemos ejercido nuestra profesión en las zonas rurales más alejadas y más vulnerables, a pesar de las dificultades y con enormes esfuerzos luchamos con convicción por sacar adelante a nuestros querido educandos.
No obstante, también se debe reconocer que aún existe una brecha en materia educativa, la cual impide cumplir cabalmente con el sueño de José Vasconcelos de que la educación se convierta en sinónimo de bienestar, desarrollo, calidad de vida y movilidad social para todas y todos.
En países donde el acceso a la educación de calidad es más equitativo para todos, independientemente de su contexto, las probabilidades de que los hijos nacidos en familias de escasos recursos vayan a la universidad y posteriormente su profesión sea tan redituable como la de los egresados provenientes de familias bien acomodadas.
En este sentido, resulta imprescindible garantizar una mayor equidad en cuanto respecta al acceso a la educación desde el nivel básico hasta el superior, a fin de que el conocimiento siga siendo no sólo un pilar para la transformación social, sino un arma fundamental para el mejoramiento de las condiciones de vida de nuestra población y para la lucha en contra de las desigualdades.
¡Enhorabuena por este primer centenario de la Secretaría de Educación Pública! y a todas y todos los que ejercemos
Es cuanto.
