El coordinador de la Alianza Verde en el Congreso de la Ciudad De México, Jesús Sesma Suárez, pidió incluir en los planes de estudio del Sistema Educativo Nacional, la materia de "Igualdad e Inclusión", la cual tiene como objetivo fomentar la no discriminación y erradicar la violencia de género, tal como ya se encuentra dispuesto en la Constitución y en la Ley en la Ciudad de México.

En la máxima tribuna de la capital, el diputado destacó que datos de la UNICEF, indican que la violencia de género en el contexto escolar es un obstáculo para la educación de las niñas, por lo que tanto la ONU-MUJERES como la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), han establecido diversas líneas de acción para acabar con la discriminación basada en el género, entre ellas, la educación.

También, Sesma Suárez afirmó que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) ha establecido y recomendado la necesidad de incorporar en el Sistema Educativo de los países, un programa de educación permanente para erradicar los estereotipos de género y la violencia contra las mujeres.

Por lo anterior, subrayó que su propuesta legislativa consiste en establecer en la Ley General de Educación los derechos que la Constitución Política de la Ciudad de México y su ley en materia de educación, ya establecen; es decir, incluir en los planes de estudio del Sistema Educativo Nacional, la materia de "igualdad e inclusión", para que se aplique en todo el país, lo que en la capital es ya toda una realidad.

Cabe destacar que la Ley de Educación de la Ciudad de México dispone en su artículo 6 que la educación impartida en la Ciudad se basará en el respeto irrestricto a la dignidad de las personas, con un enfoque de derechos humanos y pleno reconocimiento a la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres. Incorpora la perspectiva de género con un enfoque transversal en todos los ámbitos del sistema educativo de la Ciudad.

También, en su artículo 7 establece que las autoridades educativas de la capital tendrá entre sus objetivos desarrollar programas tendientes a crear y fortalecer una cultura libre de violencia hacia las mujeres, que elimine estereotipos de género e imágenes que atenten contra la dignidad de las personas e integre los valores de igualdad de género, la no discriminación, el lenguaje incluyente y la libertad de las mujeres, creándose protocolos de atención a la violencia de género y sexual contra las mujeres, que contemplen acciones de prevención, atención, acompañamiento, sanción y erradicación, no revictimizantes.