* En esta era digital se han incrementado los delitos defraude, robo de identidad y extorsión.

A propuesta del Partido Verde, El Poder Legislativo a través de la Tercera Comisión de la Permanente, de Hacienda y Crédito Público, Agricultura y Fomento, Comunicaciones y Obras Públicas, aprobó por unanimidad, un exhorto a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores para que las entidades del sistema financiero refuercen la seguridad de las plataformas electrónicas, a fin de prevenir y erradicar los delitos de fraude, robo de identidad o extorsión contra los usuarios.

El proponente del punto de acuerdo, diputado Luis Edgardo Palacios Díaz, explicó quelas transgresiones económicas y financieras alcanzaron una tasa de incidencia preocupante en nuestro país, debido a que no hay garantía para salvaguardar la privacidad de datos personales de los usuarios.

Una encuesta publicada en abril de 2018, por la firma de servicios de auditoría, impuestos y consultoría de negocios (PwC) revela la malversación de activos con un 47 por ciento; el soborno y corrupción con 30 por ciento, el fraude cometido por el consumidor con 23 por ciento; mientras que los delitos cibernéticos representaron el 22 por ciento de las conductas reportadas.

El legislador ecologista dijo que "estos ilícitos no solo afectan a las personas directamente involucradas, sino que también tienen un impacto significativo en la economía en su conjunto, socavando la confianza de los inversores, desestabilizando los mercados y perjudicando el bienestar económico de la población en general".

Lo urgente es que los clientes estén seguros al proporcionar sus datos personales y financieros a las entidades con las que interactúan, si se produce una filtración o un acceso no autorizado a esta información, se mina la confianza del público en las instituciones financieras y se afecta negativamente la estabilidad y el funcionamiento de todo el sistema financiero, remarcó.

Agregó que, el avance de la tecnología y la creciente digitalización de las transacciones financieras obliga a salvaguardar los datos personales y financieros en el sistema, porque la información incluye detalles confidenciales de los usuarios como números de cuenta bancaria, números de tarjeta de crédito, contraseñas y otra información personal sensible.

"Si los datos caen en manos equivocadas, los usuarios pueden convertirse en víctimas de fraude, robo de identidad, extorsión, de ahí, la exigencia a autoridades gubernamentales y organismos reguladores a que desempeñen un papel crucial en la prevención y persecución de los delitos. Con reglas claras disuaden y sancionan todo tipo de conductas ilegales" puntualizó.

Palacios Díaz recordó que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores tiene la atribución de establecer criterios de aplicación general en el sector financiero, además puede dictar medidas a las instituciones financieras, las empresas y los gobiernos, para que tomen medidas sólidas de seguridad cibernética y protección de datos y garanticen la confidencialidad e integridad de la información financiera de los usuarios.