*Gobiernos, empresas y sociedad civil deben garantizar un México más verde y saludable a generaciones futuras.

México ocupa uno de los primeros lugares en tasas de deforestación en el mundo, por lo que es apremiante que el Estado considere una prioridad, la conservación de nuestros bosques, selvas, manglares, humedales y zonas áridas; y en esta estrategia de recuperación, la diputada ecologista, Jasmine María Bugarín Rodríguez planteó  instaurar el *Día Nacional de la Reforestación*. 

La iniciativa implica el reconocimiento institucional de que gobiernos, empresas y sociedad civil siembren masivamente árboles en superficies deforestadas, y con conciencia, restauren nuestros bosques degradados; sería el segundo sábado del mes de julio, en virtud de que la temporada de incendios en México inicia en enero y concluye en junio.

La legisladora Bugarín Rodríguez informó que la tasa de deforestación es alarmante, fluctúa entre las 75 mil hectáreas y los 1.98 millones por año; la estimación oficial agrega que sólo en bosques y selvas, hay una pérdida de vegetación arbolada en los últimos años de cerca de 1.08 millones de hectáreas.

Por eso, la insistencia de realizar acciones que contrarresten la pérdida forestal e influyan en la regulación del clima, detengan la erosión del suelo, aumenten la disponibilidad de agua y conserven la biodiversidad.

"Con la declaración de un Día Nacional de la Reforestación, buscamos conservar y fortalecer nuestros recursos naturales, así mismo, se asume el compromiso para que las generaciones futuras disfruten de un México más verde y saludable", externó.

La iniciativa con proyecto de decreto planteada, se suma al esfuerzo de las políticas públicas en materia ecológica y económica, como el programa "Sembrando Vida" dirigido a impulsar el desarrollo rural, también colabora con el trabajo de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) de apoyar a los dueños y poseedores de bosques, manglares, humedales y zonas áridas, a fin de, cuidar, mejorar y aprovechar sustentablemente los recursos forestales presente en estos ecosistemas.

"Todo suma, lo importante es proteger la riqueza natural. México cuenta con aproximadamente 64 millones de hectáreas de bosques de clima templado y selvas que abarcan el 32 por ciento del territorio nacional. Adicionalmente poseemos 56 millones de hectáreas de matorrales y cerca de dos millones de hectáreas de vegetación hidrófila, recursos de gran importancia desde el punto de vista social, económico y ambiental", concluyó.