CON LA VENIA DE LA PRESIDENCIA

COMPAÑERAS Y COMPAÑEROS DIPUTADOS:

Las ciudades son lugares donde las personas habitan, trabajan y desarrollan una serie de actividades, dentro o fuera de sus hogares. Las labores realizadas fuera de los hogares demandan el uso de formas diferentes de desplazamiento, ya sea a través de una caminata, utilizar la bicicleta, un medio de transporte motorizado o eléctrico (autobuses, motocicletas, automóviles, ferrocarriles o metro).

Para entender cómo hacer que los desplazamientos sean más productivos y qué tipo de transportes son más útiles, es necesario comprender la composición de una ciudad, la distribución de las actividades que realizan sus integrantes, los usos que le destinan a sus espacios, así como cuáles son los factores de mayor influencia en la movilidad de las personas y en la elección de los transportes utilizados.

En este orden de ideas, los factores que intervienen en la movilidad de las personas son: el ingreso, el género, la edad, la ocupación y el nivel educativo.

Tomemos en cuenta que, en primer lugar, la movilidad aumenta con el incremento del ingreso económico; en segundo lugar, varía conforme a las características económicas y sociales de la población. Por ejemplo, personas con un nivel educativo alto, viajan más que aquellas personas que cuentan con menos estudio, en este sentido, los adultos con trabajo regular se desplazan más que los que tienen una ocupación inestable.

El transporte es responsable de la quinta parte de la emisión de gases de efecto invernadero. En este orden de ideas, los vehículos automotores contribuyen con el 16.2% del total de las emisiones, lo cual deja ver la necesidad de optar por otros patrones de movilidad urbana e innovar y desarrollar medidas efectivas y sustentables que reduzcan la emisión de dichos gases.

Además, con relación a la contaminación del aire, la presencia de bióxido de azufre en el combustible que consumen los automóviles, es responsable del 75% de la contaminación del aire, lo que también tiene efectos negativos en la salud de la población.

Como apreciamos, las necesidades de la población requieren de políticas de movilidad eficientes, que estimulen la utilización de energías de bajas emisiones contaminantes y que permitan el desplazamiento masivo, eficiente y seguro.

Los informes de ONU-Hábitat, concluyen que las malas políticas de movilidad, han restringido los derechos de los habitantes en las ciudades, puesto que los tiempos invertidos en los traslados, el costo económico y el impacto en el presupuesto familiar, así como la inseguridad que se vive en los trayectos, han deteriorado las condiciones de vida de la población.

Una de las áreas más afectadas en la ciudad de México es la productividad laboral por congestionamientos viales. La quinta parte de los trabajadores en México dedica más de tres horas diarias en trasladarse entre su lugar de empleo y su vivienda.

Aunado a lo anterior, nuestra ciudad se encuentra en la lista de ciudades con mayor tráfico en el mundo: Ciudad de México (59% de tiempo extra en cada viaje); Bangkok, Tailandia (57%); Estambul, Turquía (50%); Río de Janeiro, Brasil (47%) y Moscú, Rusia (44%).

Las políticas urbanas y de movilidad sustentable también han tenido un efecto negativo ante la falta de infraestructura peatonal, ciclista y alternativas seguras, cómodas y de calidad para interactuar en la ciudad.

Estas problemáticas han ocasionado diversos costos económicos, sociales y ambientales, que han sido resultado de la falta de una política pública constante que favorezca la definición de un modelo de desarrollo urbano para el país en general y la Ciudad de México en particular.

La Constitución Política de la Ciudad de México, establece que es deber de las autoridades adoptar las medidas necesarias para garantizar el ejercicio del derecho de movilidad, particularmente en el uso equitativo del espacio vial y la conformación de un sistema integrado de transporte público, impulsando el transporte de bajas emisiones contaminantes, respetando en todo momento los derechos de los usuarios más vulnerables de la vía, el cual será adecuado a las necesidades sociales y ambientales de la ciudad".

También dispone que es deber de las autoridades minimizar su huella ecológica en los términos de emisión de gases de efecto invernadero, a través de una estructura urbana compacta y vertical, nuevas tecnologías, uso de energía renovable, una estructura modal del transporte orientada hacia la movilidad colectiva y no motorizada, vehículos de cero emisiones de servicio público y privado, medidas y políticas de eficiencia energética, políticas de recuperación y conservación de ecosistemas, y de aprovechamiento energético del metano generado por residuos.

Por lo anterior, a través de la presente proposición, queremos invitar a la Secretaría de Movilidad, a la Secretaría de Medio Ambiente y a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, para que impulsen una política de movilidad unificada, eficiente, segura, que privilegie las energías limpias y sustentables, que a su vez cuente con un servicio público asequible y accesible para la mayoría de la población, donde el criterio de equidad sea central para las decisiones de cobertura, inversión y estructura tarifaria del transporte público.

Por lo aquí expuesto, sometemos a la consideración de esta honorable Asamblea el siguiente PUNTO DE ACUERDO:

ÚNICO. - El Congreso de la Ciudad de México, solicita respetuosamente a las Secretarías de Movilidad, de Medio Ambiente y de Desarrollo Urbano y Vivienda, todas del Gobierno de la Ciudad de México, acuerden, de manera conjunta, una política de movilidad unificada que privilegie el servicio público de transporte de bajas emisiones contaminantes, accesible, eficiente y seguro para el usuario.

Por su atención, muchas gracias.

Es cuánto, Sr. Presidente.

PARTIDO VERDE