Con su venia, diputado Presidente. 

En el Congreso de la Ciudad de México somos conscientes de la alarmante situación de violencia en el que vivimos las mujeres. Prueba de ello son las vastas intervenciones que hemos realizado en el tema diversos legisladores de todos los grupos parlamentarios.

El día de hoy no quiero hablar de estadísticas, mucho menos de la incidencia delictiva o de cuántas mujeres son violentadas día a día. Y es que, para todos nosotros, cada víctima debe verse como una derrota, porque cada vida que es violentada, destruida o extinguida, tiene costos inimaginables para todo su entorno.

La violencia en cualquiera de sus manifestaciones deja cicatrices, detiene el crecimiento de una mujer, la sume en un abismo, la sumerge en la soledad, cambia sus expectativas del mudo, borra sus sueños y trunca sus ilusiones.

En nuestras leyes hemos alcanzado logros, mismos que han significado el esfuerzo de mujeres y, porque no decirlo, de hombres convencidos de que la igualdad, la equidad y la paridad entre mujeres y hombres es a donde debemos transitar, para que el entorno social y nuestro país, tenga avances en todos los ámbitos.

La pregunta que me hago todos los días al levantarme con noticias desgarradoras que, lamentablemente se nos han hecho costumbre, es ¿cómo podemos ayudar a las mujeres violentadas y a sus familias?; ¿qué medios tenemos a nuestro alcance para darles la posibilidad de salir adelante?

El escuchar a una madre o a un padre solicitar ayuda para encontrar a su hija, saber que ella salió de su casa con la ilusión de salir adelante mediante sus estudios y que simplemente ya no regresó, eso es lo que no hemos logrado detener.

Conocer a mujeres y saber que dentro de sus hogares conviven con un verdugo al cual le temen, no por el dolor de las golpizas que le propinan, o por el daño emocional generado por las humillaciones reiteradas, chantajes o actitudes que las sobajan, sino por el hecho de estar solas, no saber a dónde acudir o como saldrán adelante sin el apoyo económico y un techo dónde vivir, todo ello debe parar.

Aunado a ello, estas mujeres, en la mayoría de los casos, son amenazadas con ser alejadas de sus hijos o con perder la vida, lo que las petrifica y no las deja actuar.

Si a esto le sumamos el hecho de tener que trasladarse a una agencia del Ministerio Publico o a cualquier instancia de gobierno, que les supone tiempo y dinero, solo para poder pedir información porque la falta de ésta las hace no estar convencidas para realizar una denuncia o pedir auxilio, entonces todo se complica más.    

Y es que la falta de información es el gran aliado de los agresores. Les permite que sus actos persistan en el tiempo, los cobija con impunidad y les proporciona más víctimas. Por cada mujer que no denuncia a sus agresores, habrá por lo menos una víctima más, por eso, el proporcionar información cercana y puntual a mujeres violentadas, propicia que presenten la denuncia correspondiente y rompe con las cadenas de impunidad.

Por ello es que debemos terminar con los obstáculos generados por la falta de información, la falta de recursos y aquellos concernientes a las distancias o traslados, para que las mujeres soliciten auxilio ante la violencia, ya que, sólo innovando métodos para su atención, podremos garantizar su derecho a vivir una vida libre de violencia.

Ante esta problemática, les propongo el siguiente Punto de Acuerdo:

PRIMERO. El Congreso de la Ciudad de México, solicita respetuosamente a la
Secretaría de la Mujer de la Ciudad de México, que, a la brevedad posible, proporcione su invaluable apoyo en el diseño e instrumentación de cursos de
capacitación en materia de violencia de género y atención a víctimas, dirigidos al
personal de los Módulos Legislativos de Atención, Orientación y Quejas
Ciudadanas de las y los diputados integrantes del Congreso de la Cuidad de México.

SEGUNDO. Las y los 66 Diputados que formamos parte de la I Legislatura del
Congreso de la Ciudad de México, realizamos el compromiso para capacitar a los
coordinadores de los Módulos Legislativos de Atención, Orientación y Quejas
Ciudadanas o al menos a un colaborador que preste sus servicios en los mismos, en materia de Violencia de Género y Atención a Víctimas.

TERCERO. Se exhorta al Comité de Administración y Capacitación del Congreso
de la Ciudad de México, para que contemple dentro de las tareas de capacitación que se
lleven a cabo en 2019, cursos de capacitación para el personal adscrito a los Módulos Legislativos de Atención, Orientación y Quejas Ciudadanas de las y los diputados integrantes del Congreso de la Cuidad de México, en materia de violencia de género y atención a víctimas; lo anterior a efecto de que se proporcione los insumos necesarios para su realización.

Estimadas amigas y amigos:

Al aprobar este punto de acuerdo de urgente y obvia resolución, estaríamos realizando un compromiso sin precedentes por parte del Congreso de la Ciudad de México para ayudar a las mujeres víctimas de violencia, proporcionando un apoyo cercano y puntual, fortaleciendo el acceso a su derecho a una vida libre de violencia.  

Muchas gracias por su atención y apoyo.

Es cuánto, Sr. Presidente.

PARTIDO VERDE